Cuando se trata de planificar la diversidad, la equidad y la inclusión en eventos, hay tantos factores a considerar que es fácil sentirse abrumado y perder de vista los importantes.

“¿Cómo planificar apropiadamente?”

 “¿Estamos siendo parciales?”

“¿Estamos creando un ambiente cómodo para todos?”

Daisy Crane, gerente de desarrollo comercial de Travel Partner Network con American Express Meetings & Events, ha compartido sus mejores consejos profesionales a través de consejos prácticos reales y una guía de lista de verificación para su próxima reunión.

Lo primero es lo primero. Daisy enfatiza la importancia de tener en cuenta que la diversidad va más allá de lo que nuestros ojos pueden ver y que las características únicas de las personas son mucho más complejas que el género y la raza. La diversidad tiene múltiples capas y es multidimensional. Por ejemplo, las dimensiones primarias de uno involucran características como la edad, la identidad de género, la raza y las habilidades físicas y mentales. Las dimensiones secundarias incluyen la composición familiar, la nación de origen, el idioma, el nivel socioeconómico y la educación. Las dimensiones organizacionales se relacionan con las experiencias profesionales, la ocupación y las afiliaciones institucionales. Las dimensiones culturales incluyen la religión y las tradiciones culturales.

Con esto en mente, comience a planificar y comunicarse con sus partes interesadas para averiguar cuál es su posición sobre la inclusión y quién es su audiencia. Aquí hay seis consejos prácticos para empezar:

Asistentes: piensen en las “dimensiones” potenciales, como las diferencias intergeneracionales, la ciudadanía internacional, la identidad y equidad de género, el estatus socioeconómico, las discapacidades, la religión, etc.

Lugar, formato y configuración: evalúe si el destino/lugar podría percibirse como discriminatorio, elija un formato de reunión que fomente la colaboración y evalúe si el diseño de las instalaciones/salas permite una movilidad y accesibilidad convenientes.

Diversidad de proveedores: eleve la competencia entre proveedores existentes, locales y nuevos para generar valor adicional, diversidad de pensamiento y perspectivas.

Selección de oradores: evite utilizar oradores habituales recomendados. Asegúrese de que los oradores sean representativos de la audiencia y ayuden a promover ideas inclusivas.

Comunicación: cree una estrategia que tenga en cuenta la diversidad de imágenes y un lenguaje neutral en cuanto al género y fácil de entender. Considere las herramientas y la tecnología necesarias para la accesibilidad, como el lenguaje de señas, las segundas pantallas y las traducciones.

Fecha y agenda del evento: esté atento a las principales festividades religiosas y nacionales. Adapte una variedad de preferencias dietéticas (vegetariano, vegano, etc.) e incorpore entretenimiento y actividades adecuadas para audiencias diversas.

No se detiene aquí. Hay mucho más que puede hacer antes, durante y después de un evento para ser inclusivo. Descargue nuestra lista de verificación para planificar reuniones y eventos inclusivos para obtener más información.

“Si no tienes un plan de inclusión, tu plan es ser exclusivo”.  Catrice M. Jackson.